Quique Ramos es uno de los jugadores que puede presumir de haber eliminado al Real Madrid de la Copa del Rey en los años en los que jugó en el primer equipo del Atlético de Madrid. Recuerda que fue en la temporada 86-87, cuando el Real Madrid ganó 3-2 en la ida disputada en el Bernabéu, para superar los rojiblancos en el Calderón a su eterno rival por 2-0.

En declaraciones a la página web del Atlético, Quique Ramos reconoce que “en nuestra época era difícil ganar al Madrid. Si ganábamos teníamos que hacerlo de forma rotunda”.

Lo que tiene muy claro el que fuera lateral zurdo de los años 80 en el conjunto rojiblanco es que “hay que quitarse de la cabeza lo sucedido en Alicante. Son partidos distintos, en los que a un jugador no hace falta que el entrenador le diga nada. Hay que poner en el campo lo que hay que poner y nada más. Al Madrid no le puedes dejar jugar porque te machaca. Contra el Villarreal lo demostró porque los amarillos jugaron muy bien pero al final en dos jugadas perdieron”.

El nivel de la Liga actual a cuando Quique Ramos jugaba es muy distinto. “Ahora, Real Madrid y Barcelona están muy por encima de los demás y eso se ve en el terreno de juego. Pero somos once contra once y si no les dejamos jugar es difícil que nos hagan goles. A mí nunca me han asustado los nombres. Nosotros sabíamos lo que teníamos que hacer contra el Madrid. En mi época ganábamos al Madrid y al Barça pero ahora es distinto quizá por el desnivel que hay en la Liga”.

De todas formas, se muestra optimista porque “la Copa es una competición especial, distinta, y se arriesga más que en la Liga porque te la juegas en dos partidos. Hay que pensar que si tienes un resultado ajustado en la ida podemos resolver en el Vicente Calderón”.